lunes, 28 de septiembre de 2015

Llora el cielo a un año de Ayotzinapa

Tres muertos, otros más heridos y 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa desaparecidos fue el saldo de la noche triste de Iguala Guerrero; a un año de los hechos del 26 y 27 de septiembre del 2014 el día lluvioso inundaba de rabia e indignación los corazones de miles de manifestantes que acompañaban a los padres de los 43 que marchaban sobre la Avenida Reforma en la Ciudad de México exigiendo justicia mientras sus gritos llegaban hasta el cielo cubierto de tristes nubes que anunciaban lluvia.
Fuera Peña, Fue el Estado y el infinito conteo del 1 al 43 ahogado en el grito de Justicia! que los encargados de impartir justicia y aplicar la ley no escuchan, niños con globos multicolores, jóvenes con “lágrimas de sangre” pintadas en sus rostros y largos ríos de gente  eran algunas imágenes que llenaron la principal avenida de la capital mexicana durante el primer aniversario luctuoso por los hechos ocurridos en Iguala aquella noche de septiembre donde también el cielo dejo caer su llanto.
Durante más de 5 horas no paraban los gritos por los 43 y los más de 20 desaparecidos en todo el país, miles de indignados exigieron castigo a los culpables, campesinos de San Salvador Atenco, Yaquis y Xochicuautla con el puño en alto reclamaban al gobierno de Peña Nieto detener ecocidios y despojos de tierras en comunidades indígenas, mientras  los padres de los normalistas de Ayotzinapa con el rostro cansado y su andar firme señalaron al gobierno federal como responsable del paradero de sus hijos.

























Con el cielo derramando lágrimas en la Plaza de la Constitución una sola voz retumba en la fachada del palacio nacional ¡porque vivos se los llevaron, vivos los queremos! Los familiares y padres de los 43 frente a miles que a pesar de la lluvia que en ningún instante cesó prometen seguir buscando a sus hijos hasta encontrarlos, la voz firme de doña Carmelita (madre de una de las víctimas) calentó los corazones que mezclados con la lluvia despertó la indignación que se veía en los tantos rostros solidarios en la plancha del Zócalo, cuando miró al cielo y se debilito su voz casi derrotada por el llanto para prometer a su hijo encontrarlo donde quiera que se encuentre.

























La verdad histórica de este 26 de septiembre de 2015 es que miles se unieron a la exigencia por la presentación con vida de 43 jóvenes estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero así como pedir al gobierno de Peña Nieto detener la violencia, las desapariciones forzadas, despojos de tierras y otros más solicitan su renuncia inmediata;  la lluvia siguió, la inconformidad quedo en el ambiente pareciendo que la paciencia del pueblo mexicano es más grande que la misma indignación.